Rebajas entre 10 y 30 euros al año en la tasa de basura. Esta es una de las ideas que maneja el equipo de gobierno para animar a los pontevedreses a apostar, igual que el Concello, por el compostaje como nuevo sistema de tratamiento de basuras. El gobierno local, en colaboración con la Diputación, ha comenzado ya los estudios económicos para establecer las bonificaciones que se aplicarán en el recibo bimensual de la basura a partir del próximo año a los usuarios en función del resultado de la recogida selectiva de la materia orgánica y su conversión en compost.

Así lo anunció ayer el concejal de Facenda, Raimundo González Carballo, que admite que por el momento no está definido la modalidad de las bonificaciones, pero sí apuntó que se aplicarían por barrios y parroquias, toda vez que resulta "muy difícil" hacerlo casa por casa. En todo caso, señala que el objetivo básico es "animar" a los ciudadanos a implicarse en el modelo y ofrecer estas rebajas como un "incentivo más", además del propio beneficio medioambiental que, a juicio del Concello, supondrá este nuevo método de tratamiento de los residuos orgánicos.

Tampoco está claro el calendario de aplicación, ya que está por decidir si las bonificaciones se pondrán en marcha a medida que se instalen los composteros por los barrios, o cuando esté toda la red implantada en el municipio. Solo está decidido que las rebajas serán graduales, en función de los resultados en cada zona. "Si la separación es buena, la bonificación será superior que donde sea mediocre", dijo ayer González Carballo.

Actualmente, la tasa domiciliaria de la basura se sitúa en 21,93 euros por bimestre, es decir, algo más de 131 euros al año por casa abonada, mientras que en el rural se reduce esa cifra en un 45%, hasta sumar unos 72 euros al año. Todo apunta a que finalmente se aplicará una tasa para los domicilios que tengan composteros individuales, otra para los barrios con composteros colectivos y una más para las áreas sin esas opciones.

Por el momento, solo Monte Porreiro cuenta en el casco urbano con composteros comunitarios, aportados por la Diputación, si bien el Concello ya prepara la compra de 300 por 172.000 euros para extender el sistema en este barrio y llevarlo también a Campolongo. En ambas áreas atenderán a más de 8.000 vecinos.

En Monte Porreiro se contabilizan 2.160 viviendas en las que residen unas 4.600 personas. El total de residuos por tonelada es de 1.776,80 toneladas al año, repartidas de la siguiente manera: Materia orgánica: 746,25; Papel: 319,82; Envases: 266,52; Vidrio: 106,61; Otros: 337,59.

En Campolongo, el ámbito está delimitado por las calles: avenida de Vigo, Fernández Ladreda, Alfonso X El Sabio, Travesía de Luis Braille, Eduardo Blanco Amor, General Rubín y Augusto González Besada, plaza de Galicia y Andrés Mellado.

En este barrio estarían contabilizadas 1.694 viviendas con unos 3.500 vecinos. Según el estudio, los residuos que genera el barrio son 1.351 toneladas al año, repartidas de la siguiente manera: Materia orgánica: 567,47; Papel: 243,20; Envases: 202,67; Vidrio: 81,07; Otros: 256,71.