Ante la sentencia del Tribunal Supremo que confirma la nulidad de licencia con la que se ejecutaron los 28 chalés de Boavista, en A Caeira, el Concello de Poio estudia ahora todas las vías para legalizar las viviendas, sin contemplar en ningún momento la opción del derribo.

El alcalde del municipio, Luciano Sobral dijo ayer que a partir de ahora "lo que nos queda es iniciar un proceso de legalización de una nueva licencia para esas 28 viviendas. Nosotros pensamos que es viable y que hay fórmulas para hacerlo".

El problema de fondo con esta construcción radica en la edificabilidad, es decir, en el espacio de superficie construida. Desde el tribunal creen que lo edificado en la parcela es demasiado con respecto a la superficie del terreno, por lo que la administración local se ha puesto manos a la obra para estudiar las posibilidades de ampliación de la parcela. Esto puede ser viable tras la tramitación de una nueva licencia, la posible modificación puntual del PXOM en ese punto concreto y aumentarle metros a la parcela al poder incorporarle algunas zonas de cesión municipal que hay alrededor de los adosados. La incorporación de este espacio de suelo público, podría hacer que todo se ajuste más a lo que el Tribunal exige.

El Partido Popular de Poio preguntó también al Concello sobre el tema en la comisión de Urbanismo. La edil Rocío Cochón, preguntó "qué va a hacer el Ayuntamiento" en relación a este fallo, que desestima los recursos del concello y los propietarios contra la segunda sentencia del TSXG en este sentido.

Cochón explicó que los representantes del bipartito se limitaron a confirmar que "tendrán que cumplir la sentencia", tras lo que la concejal del PP urge a explicar el antes posible "a que se refieren con cumplir la sentencia".

La idea del gobierno local es que sean ellos mismo quienes asuman la tramitación de la nueva licencia, y estudian ahora la viabilidad de hacerlo caso por caso o en conjunto.