La asociación Juan XXII de apoyo a las personas con discapacidad intelectual, que acaba de celebrar su comida de Navidad con más de 250 asistentes, ha potenciado su programa de Respiro Familiar con la apertura en estas fechas de la vivienda tutelada que la entidad posee en Pontevedra. La asociación entiende que "las familias y cuidadores de personas con discapacidad intelectual suelen descuidar sus propios cuidados, renunciar a vacaciones y a su tiempo libre al tener que atender a sus familiares durante estas fechas", de ahí que abra su "vivienda tutelada para permitir a las familias poder atender otras circunstancias y compromisos ya sean de tipo laboral, personal o familiar o simplemente puedan descansar o disfrutar del tiempo de ocio". La casa, cofinanciada por la Diputación, promueve entre los usuarios un entorno de autocuidado y de fomento de relaciones y sus habilidades.