El propietario de la empresa gallego de supermercados Magín Froiz y el alcalde de Barro, el nacionalista Xosé Manuel Fernández Abraldes, estuvieron ayer en la casa consistorial del municipio para rubricar la firma definitiva para el convenio por el cual la compañía Froiz comenzará con las obras para posicionar su gran nave de distribución y centro logístico en el polígono industrial de Barro-Meis.
El objetivo de la firma gallega es ponerse cuanto antes manos a la obra para arrancar con los trabajos de adaptación de este suelo industrial en el que tienen previsto poner en funcionamiento su nave principal, de 21.000 metros cuadrados, en un plazo no superior a tres años. El objetivo, según dijo ayer Froiz, no es otro que "en un plazo de dos a tres años tengamos allí una de las mejores naves de distribución de España".
La idea de la empresa alimenticia pasa por emprender un proyecto que calculan se prolongará al menos una década para dar por finalizado todo el proyecto global que tienen previsto en este gran espacio adquirido. El directivo confirmó que la idea pasa por instalar también naves adyacentes de reciclaje de cartón y plástico así como una guardería y un comedor para sus trabajadores. Este gran espacio de trabajo podría albergar a más de medio millar de empleados entre reubicados y nuevas contrataciones.
Froiz quiso hablar también del carácter ecológico de este polígono, situado en un emplazamiento rodeado de árboles y zonas verdes y que casa muy bien con los ideales verdes de su empresa, que en los últimos tiempos ha apostado por una evolución mucho más ecológica reciclando sus materiales, lavando la flota con aguas pluviales e instalando placas solares en muchas de sus instalaciones, algo que también esperan poder hacer en Barro-Meis.
Por último, el empresario alabó también el emplazamiento de estos terrenos, situados en una zona "entre autopistas" para facilitar las labores de distribución de los productos y también evitar cualquier molestias que pueda ocasionar en el pueblo el importante trasiego de camiones.
Con la firma del convenio firmado ayer, Barro cede a la compañía el uso de los viales perimetrales del solar adquirido hace dos años que tiene unas dimensiones de 70.000 metros cuadrados. El proyecto del polígono industrial no se verá prácticamente alterado con la llegada de Froiz ya que la única modificación será la permutación hacia un emplazamiento externo al terreno adquirido por la alimenticia de un espacio ideado en un primer momento como zona de aparcamiento.
Efecto reclamo
Para el regidor de Barro Fernández Abraldes, el de ayer fue un día "de mucha alegría" y aseguró que desde que fueron conocedores del interés de Froiz por los terrenos, los técnicos del ayuntamiento se volcaron con el proyecto con el fin de acelerar lo máximo posible los trámites para que el proyecto se pudiese llevar adelante con celeridad. El alcalde quiso acordarse también del anterior gobierno municipal, el que hizo posible la construcción de este espacio industrial que ahora su administración tiene por objetivo llenar de empresas.
Abraldes asegura que la llegada de esta importante empresa gallega a Barro-Meis es el principio de un importante crecimiento para el polígono y hasta siete empresas se han puesto en contacto ya para iniciar los trámites de cara a un posible traslado a los terrenos colindantes al de Froiz.
