La ronda Este de Pontevedra entre O Marco y San Mauro, pendiente de ejecución desde hace casi un año, se aplaza. La Diputación decide rescindir el contrato de adjudicación de diciembre de 2015, por 1,1 millones de euros a la empresa Elsan y anuncia la reforma del proyecto original con un presupuesto sensiblemente superior, de 3,3 millones.

El vicepresidente de la Diputación, César Mosquera, esgrime que el diseño elaborado durante el anterior mandato carecía de informes ambientales y de la Axencia Galega de Infraestruturas, que ahora obligan a rehacer parte del proyecto, en especial en los entronques del futuro vial con dos carreteras autonómicas, la de O Pino-Bora y la de Ponte Caldelas. Además, las expropiaciones han pasado de 460.000 euros a 1,3 millones.

Por tanto, se estima ahora que en febrero de 2017 estará redactado el nuevo proyecto y después se licitarán las obras. De momento, el primer paso es prorrogar al menos por un año más el convenio suscrito en abril de 2013 entre el Concello y la Diputación, ya que este vial, de un kilómetro municipal, fue una propuesta municipal que asumió la administración provincial. Ese acuerdo también establecía un reparto de la financiación que ahora habrá que revisar al aumentar la cuantía. Entonces se estimaban unos 2,3 millones en total para obras y expropiaciones y ahora se calcula que serán necesarios 4,6.

La ronda Este discurre desde la PO-542 en O Marco y desemboca en la carretera de Ponte Caldelas en San Mauro y su objetivo es habilitar un acceso directo desde la zona de O Pino hasta el hospital Montecelo, además de retirar el tráfico de viales muy angostos e insuficientes como las rúas das Pereiras y das Olivas. Con la decisión de Sanidade de ubicar el futuro hospital único en Montecelo, su ejecución cobra mayor importancia.