Los grupos de la oposición de Pontevedra han aprobado en comisión 22 de las 34 enmiendas presentadas al presupuesto municipal planteado por el gobierno del BNG, que no aceptó ninguna de las modificaciones propuestas. Así, en el pleno del próximo lunes 19 se debatirán unas cuentas para 2017 modificadas por la oposición (PP, PSOE, Marea y Ciudadanos) que el BNG, con gobierno en minoría, no tiene intención de asumir. Al pleno del lunes irá el documento ahora modificado y el gobierno local planteará un voto particular para rechazarlo.

El alcalde nacionalista, Miguel Lores, calificó la aprobación de estas enmiendas de "una gamberrada" de la oposición, dentro de "un pacto en toda regla" de los cuatro grupos para imposibilitar la gobernabilidad, "liderados por el PP", aseveró.

Visiblemente enfadado, tras la comisión de Economía e Facenda en la que esta mañana se aprobó el documento modificado, el alcalde de Pontevedra denunció que la oposición "trata de tumbar un gobierno legítimo" y calificó el acuerdo de los grupos de "moción de censura encubierta y cobarde". "Esto lo hicieron a mala leche", protestó. Y tras advertir que "no voy a gobernar con unos presupuestos de la oposición", les instó nuevamente a presentar una moción de censura y formar un gobierno alternativo.

"Destrozan el modelo urbano"

Lores entiende que las enmiendas aprobadas en comisión "destrozan el presupuesto" e "imposibilitan" gobernar. "Destrozan -añadió- el modelo urbano y una forma de gobernar brillante, positiva". Para Miguel Lores, PP, PSOE, Marea y Ciudadanos "van en contra de los intereses de los ciudadanos de Pontevedra" por los que les pidió "sentidiño" para que cambien su postura en el pleno.

Los portavoces del resto de grupos de la corporación coincidieron en criticar la intransigencia de Lores ante cualquier modificación sobre sus postulados y recordaron que el BNG ya no dispone de mayoría en la corporación "algo que aún no asumieron", como recordaron varios portavoces de la oposición. El socialista Agustín Fernández lo resumió diciendo que "se rompió su juguete y ahora ya no quiere jugar, como un niño mimado".