El Concello de Ponte Caldelas ha decidido precintar el parque infantil de Vilarchán debido al deterioro que presenta y que podía implicar algún riesgo para sus usuarios. Según el alcalde, Andrés Díaz, el recinto está formado por juegos con elementos metálicos y algunos de madera y presentan piezas oxidadas y rotas "tras años de abandono". El grado de deterioro impedía en la práctica utilizar los juegos por el riesgo de que algún niño resultase herido, de ahí que se haya optado por su precinto.
El Concello recuerda que se trabaja en un "plan integral de mejora y modernización de los parques infantiles del municipio" y anuncia que "en los próximos días" se reparará el de Vilarchán. Díaz explica que hace año y medio, cuando accedió a la Alcaldía, se encontró con varios parques en la misma situación y desde entonces ya se repararon al menos los de Caritel, Xustáns y el del propio casco urbano.
Por otra parte, la carretera que comunica Vilarchán con Contixe, en Ponte Caldelas, cuenta con un badén reductor de velocidad como medida de seguridad vial instalada por el Concello, a petición de los vecinos, que se quejaban de situaciones de riesgo cerca del parque infantil.
