La plantilla de la concesionaria de la recogida de basura en Pontevedra, Cespa, confirmó hoy a la empresa, a la Subdelegación del Gobierno y a la autoridad laboral la convocatoria de una huelga indefinida en el servicio a partir del próximo día de Navidad a las 22.30 horas.

La causa de la huelga es la rotura de las negociaciones para la firma de un nuevo convenio, un diálogo que estaba abierto desde marzo pero que la plantilla da por roto ante la insistencia de la empresa en no contabilizar en el pago de la antigüedad el tiempo en el que los trabajadores estuvieron trabajando con contratos temporales para la empresa antes de convertirse en fijos. Un punto en el que los trabajadores se niegan a ceder, dado que además, indicaron, es un derecho reconocido judicialmente por el Tribunal Supremo en una sentencia.

Los trabajadores confían en que todavía se puedan retomar las negociaciones y llegar a un acuerdo para evitar un paro que paralizaría el servicio de limpieza y recogida de la basura en la ciudad en plenas fiestas, de tal forma que los trabajadores estiman que la huelga tendría una fuerte repercusión en el estado de las calles.

Como telón de fondo de este conflicto también está el final de la concesión del servicio de limpieza y recogida de basuras, algo que los trabajadores creen que influye en esta situación. Adjudicado en el año 1999, la actual concesión está a punto de tocar a su fin y los trabajadores denuncian cierto afán de la empresa adjudicataria para intentar ahorrar costes al máximo tanto a la hora de negociar el convenio como en el momento de cubrir bajas laborales, algo que no ocurre "desde hace un año aproximadamente", según explicaron ayer en rueda de prensa. Esto provoca, según también denuncian, que se esté incumpliendo por parte de la empresa parte de lo estipulado en la concesión como que, por ejemplo, todos los días haya en la calle menos maquinaria y operarios de los que realmente precisa una ciudad como Pontevedra.