AnovaTerra denunció ayer el "despilfarro que realiza el alcalde" de Caldas, Juan Manuel Rey "en la construcción de las pozas de A Tafona, que carecen de viabilidad como instalación termal mineromedicinal toda vez que el agua prevista para dicha instalación esta calificada por la Consellería de Industria como residual, que en ningún caso podrá tener propiedades mineromedicinales".

La agrupación subraya que "el alcalde sabe que no dispone de concesión de agua termal mineromedicinal para las pozas, en las que ya lleva gastado cerca de un millón de euros, por lo que intentó infructuosamente lograr autorización para hacer un pozo junto a la fuente de la Burga y un pozo en la finca de A Tafona sin conseguirlo".

"El último capítulo de esta historia de despropósitos y la tentativa del alcalde de anular el carácter publico y vecinal de la fuente de la Burga, fue promover un incidente de ejecución de sentencia, para poder desviar el agua a las pozas y dejando la fuente publica situada en el Camiño Portugués sin caudal y privatizar el uso del agua en contra de un derecho histórico y a espaldas de los vecinos.", explica AnovaTerra, que detalla que "el auto del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia del 10 de noviembre desestimó la petición de Rey pero su amenaza se mantiene al presentar el día 23 de noviembre un recurso de reposición contra la desestimación TSXG" .