Distintas asociaciones vinculadas a las personas con discapacidad, física motriz, mental, visual o auditiva, celebran hoy el Día Internacional de la Discapacidad con una llamada para visualizar sus derechos, anhelos y también reivindicaciones.

Es el caso de la Asociación Juan XXIIII, un grupo de cuyos usuarios fue recibido ayer por el alcalde, Miguel Fernández Lores, al que solicitaron "más compromisos en accesibilidad cognitiva", además de agradecerle el esfuerzo por adaptar la ciudad a todos sus vecinos.

Las actividades programadas por Juan XXIII continuaron durante la tarde en la Casa da Luz con la apertura de la exposición en la que se propone un recorrido por los deseos de las personas con discapacidad intelectual.

La muestra, que podrá visitarse hasta el próximo día 5, se reparte en 25 imágenes captadas por la fotógrafa Lorena Oliver Navarro y referidas a centros, servicios y actividades de Juan XXIII.

Los responsables de la colección fotográfica señalan que "los verdaderos protagonistas son las propias personas con discapacidad, que expresan en primera persona sus deseos: tener apoyos, ser felices, sentirse plenamente incluido en la comunidad, llevar una vida saludable, tener ocupación..."

Aprovechando las celebraciones vinculadas al Día Internacional de la Discapacidad, Juan XXIII también ha hecho públicos sus proyectos de futuro, que pasan por la creación de una residencia y un centro de día que den respuesta "a las necesidades que demandan las personas con discapacidad intelectual y acorde a su plan estratégico".

Recuerdan los portavoces de la asociación que el envejecimiento poblacional supone un incremento en la demanda de servicios sociales especializados. "Las personas con discapacidad intelectual", añaden, "no son ajenas a esta realidad social, sino que además su situación es más acuciante, puesto que su proceso de envejecimiento y deterioro cognitivo suele manifestarse en edades más tempranas".

También recuerdan que muchas de estas personas viven en núcleos familiares en los que los padres tienen ya una avanzada edad, por lo que sus capacidades para el cuidado están cada vez más limitadas.

La Asociación Juan XXIII recordó ayer que este problema es especialmente claro en Pontevedra, donde "existe una carencia absoluta de residencias para personas con discapacidad intelectual", lo que contribuye al desarraigo de sus familias ya que tienen que acudir a otros centros fuera de la comarca.

"Non me mitifiques..."

También la Asociación de Sordos Xoga conmemora el Día Internacional de la Discapacidad, en este caso con el lanzamiento de la campaña "Non me mitifiques polo nome". En ella plantea que modificando simples acciones de la vida diaria, para empezar el vocabulario con el que nos referimos a estas personas, ayudaríamos a un mundo más igualitario.

"Modificar la terminología", por ejemplo no empleando "sordomudo" sino "persona sorda" o "mudito" sino "perdona sordociega", si ayuda "a mejorar la calidad de vida de los vecinos de Pontevedra con pérdida sensorial".

Asimismo, la campaña se propone hacer más visibles estas discapacidades (sordera, pérdidas auditivas, sordoceguera) y así promover una cada vez mejor convivencia y accesibilidad de la ciudad.