La empresa Umia Iluminación, que ganó el pasado año el concurso para realizar las decoraciones de distintas fiestas, ha sido la encargada de instalar el grueso de los adornos led que alumbran desde ayer la Navidad capitalina.
Se trata de arcos, esferas, estrellas y otras estructuras que se reparten por el centro de Pontevedra y también los barrios de Monte Porreiro y Estribela.
Asimismo, en varias plazas se han instado árboles de Navidad realizados con luces, caso de los ubicados en Curros Enríquez, Méndez Núñez y A Ferrería. Ésta fue escenario del encendido del alumbrado, un simbólico pistoletazo de salida a la fiesta que se completó con la música de Pel e Pau.
El grupo de música tradicional interpretó panxoliñas y otras piezas típicas de estas fiestas y durante la actuación se fue sucediendo el encendido de la iluminación navideña en distintas fases.
El Centro Comercial Urbano (CCU) Zona Monumental ha corrido a cargo de la iluminación del centro histórico, mientras que Aempe sufragó los arcos de distintas calles del centro.
Azul, blanco y verde son, un año más, los colores dominantes en la iluminación. Ésta también se extiende a los árboles de los jardines de Casto Sampedro.
Las luces se mantendrán hasta el 7 de enero. A diario se encenderán de 18 a 1 horas, a excepción de los próximos días 24 y 31 cuando no se apagarán hasta la madrugada.
Los primeros en encender el alumbrado fueron el pasado viernes los comerciantes de la calle Manuel Quiroga. Al igual que muchos otros propietarios de establecimientos, están convencidos de que la iluminación navideña ambiente y contribuye a fomentar las ventas.
Y es que la promoción de las compras es, amén de la ambientación de la ciudad, es uno de los objetivos centrales de la iluminación navideña, no en vano distintos sectores realizan en esta temporada el grueso de sus ventas.
Es el caso de las tiendas de juguetería, que concentran en Navidad y Reyes un significativo porcentaje de su cuenta anual de resultados.
