Un hombre de 67 años, Francisco Lois Sanz, falleció ayer en Vilaboa al sufrir el atropello de un autobús escolar en un cruce cercano al Bar O Toxo, en la parroquia de Santa Cristina de Cobres, a las puertas del colegio de Riomaior. La víctima, vecino de la zona, fue sorprendida mientras cruzaba un vial que dividía la acera por la que caminaba para subirse a un taxi que le esperaba unos metros más adelante. Ese vial, un desvío de la N-554 que da entrada a la zona de Aldea Costa, es el que utilizan normalmente los autobuses escolares como método de acceso al CEP Plurilingüe Riomaior.

El suceso se produjo en torno a las 13,40 horas del día de ayer, cuando el vehículo, sin pasajeros, se aproximaba al centro para recoger a los alumnos a la finalización de la jornada escolar matinal. El conductor tomó la curva a poca velocidad, pero se encontró con Francisco Lois, que en ese momento cruzaba pese a que el vial, de escasos cuatro metros de ancho, no dispone de paso de cebra ni ningún tipo de señalización para favorecer el tránsito de peatones.

La poca velocidad no fue impedimento para provocar el fallecimiento del hombre, aunque ayer todavía estaba por esclarecer si la causa de su muerte fue el golpe contra el vehículo o la posterior caída al suelo. Según varios testigos, la presencia de varios coches estacionados en el lugar pudo reducir todavía más la ya de por sí escasa visibilidad. Las dificultades de movilidad de la víctima, así como su complexión física "muy delgada" también pudieron favorecer el trágico desenlace final.

Al lugar del suceso se desplazó un equipo médico, así como efectivos de Protección Civil, Guardia Civil, Policía Local y Carreteras del Estado. Sin embargo, los facultativos no pudieron evitar el fallecimiento del hombre. El conductor del autobús declaró y pasó los test de control de alcohol y drogas mientras el autobús permanecía estacionado en el lugar del suceso impidiendo la circulación habitual por la N-554, que se restableció horas después.