El PP de Poio solicita a Luciano Sobral, alcalde de la localidad, que se reúna con Miguel Fernández Lores, regidor de Pontevedra, para aclarar el futuro de los terrenos por los que ambos concellos pleitean desde hace casi 30 años. Pese a que el grupo de gobierno local todavía no ha recibido notificación alguna sobre la resolución exigida al Instituto Geográfico Nacional acerca de la propiedad del territorio fronterizo entre los dos municipios, el bloque popular encabezado por Ángel Moldes pidió ayer a Sobral que se reúna "lo antes posible" con el gobierno de Pontevedra para "negociar" las consecuencias del posible deslinde, que daría la razón a Poio y, por tanto, situaría en ese municipio el parque de Bomberos.

Para el PP, "sería una gran noticia" que el IGN le diese la razón a Poio y, por tanto, "a los populares". Moldes considera que su partido es "uno de los principales abanderados de la corrección de las lindes". Considera que ahora es el momento de sentarse a hablar con el gobierno de Pontevedra y exigir que los bomberos, "que pasarán a ubicarse en Poio, comiencen a prestar servicio en el municipio cuando haya una emergencia". Para el PP, Poio es el único Concello "con parque de bomberos pero sin servicio de bomberos".

Sin embargo, Sobral quiso ser prudente acerca de la cuestión. El regidor todavía no tiene constancia del informe del IGN y una vez lo reciba, será el momento de establecer la mesa de trabajo y analizar si el documento responde a las demandas poienses, que responden al deslinde de 1889.

Respecto al tema del parque de bomberos, Sobral mantiene que, en principio, está previsto que la sede del servicio del servicio de emergencias se desplace con motivo de las obras proyectadas para mejorar el nudo de acceso a la PO-308 y a la PO-531. "Si es necesario moverlo, la idea prevista es colocarlo en el futuro polígono de Fragamoreira o en A Reigosa". De todos modos, Sobral tiene claro que "no habrá problema para llegar a un acuerdo y Poio no pondrá pegas".

Mientras, los terrenos donde está ubicada la Comandancia de la Guardia Civil "ya pertenecían a Poio en la práctica". "La licencia para construir el local la otorgamos nosotros a través de un convenio y los vecinos que viven allí ya pagan sus impuestos en Poio, por lo que el informe no cambia nada en este sentido", recuerda Sobral.

El alcalde de Poio se mostró predispuesto a tender la mano a Pontevedra para negociar y aunque dejó claro que cada uno defenderá sus intereses, no considera que este tema vaya a enturbiar las relaciones entre ambos concellos. En ello coincide también Lores, que ayer negó que exista "guerra" alguna y resta importancia al deslinde.