Fracasado el intento de acuerdo con el grupo socialista para sacar adelante los presupuestos municipales de 2017 con una mayoría suficiente, el gobierno local (BNG) anunció que mañana aprobará las cuentas. Posteriormente, el concejal de Hacienda, Raimundo González, hará entrega a los partidos políticos del proyecto presupuestario definitivo. A partir de ese momento la tramitación seguirá su curso hasta llegar el pleno, donde el gobierno local está en minoría y ninguno de los otros grupos prevé, inicialmente, apoyar las cuentas. El gobierno del BNG no prevé someterse a una cuestión de confianza y "agotará los plazos" para intentar aprobar el presupuesto, según indicó el edil de Hacienda.

Esta mañana remató sin acuerdo la ronda de negociaciones con los grupos de la oposición. El diálogo con el PSdeG-PSOE sobre los presupuestos llegó a su fin después de cuatro reuniones. Para el concejal de Hacienda, Raimundo González, el grupo socialista puso sobre la mesa cuestiones contrarias las que planteaba cuando formaban parte del gobierno local.

El hecho de que las cuestiones formuladas por el PSOE y también por el PP -como las vías sanitarias, la eliminación de los directores generales o la bajada del IBI- son independientes del presupuesto, lleva a Raimundo González a pensar que "es un presupuesto bueno y con pocas pegas" por lo que añade que "serán ellos los que tengan que justificar su voto en contra y porque no su abstención".

El presupuesto municipal para el próximo año tiene una cuantía de 72.900.000 euros -casi un millón de euros más que en el presupuesto vigente- sin incluir la aportación de los fondos Feder (DUSI) que con cargo a 2017 supondrá una inyección a las inversiones municipales de 2.504.000 euros.