La Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) tiene ojos en todos lados. Al menos, así lo demuestra la denuncia judicial interpuesta al Concello de Barro por incumplimiento del pago de las tasas que la institución exige por derechos de autor en cualquier tipo de evento multitudinario en el que se interpreten actuaciones musicales.
La SGAE reclama al Consistorio al menos 10.000 euros en concepto de multa por no haber pagado dichos derechos entre los años 2009 y 2015 en la Festa do Viño. La sociedad exige al Ejecutivo el 7% del dinero pagado a todas las orquestas durante esas ediciones y, además, un plus en concepto de IVA. Ese condicionante en forma de impuesto es el que todavía impide al Concello conocer exactamente el importe, pues está por ver si el porcentaje aplicado es el que corresponde a la actual carga o esta varía en función del ejercicio. En este caso, la cantidad correspondiente a 2009, por ejemplo, sería menor a la exigida en 2015.
Ante esta situación, el Concello ya ha previsto una partida especial en sus presupuestos de 10.000 euros para hacer frente a los costes. De todos modos, el actual alcalde, Xosé Manuel Abraldes, se desmarca acerca de la culpabilidad en este tema: "Estas son las sorpresas que nos encontramos de vez en cuando gracias a la anterior gestión".
Según Abraldes, la SGAE ya interpuso otra denuncia en 2003. Esta reincidencia en el impago por parte del anterior ejecutivo obliga a "pagar ahora por una cantidad de años mayor. Si no, no nos exigirían desde 2009". Abraldes informó de que por la edición de la Festa do Vino el Concello ya 1.400 euros a la SGAE.
