"No buscamos como primer objetivo incrementar el número de ciclistas sino que conozcan el uso de la bici, por experiencias en Holanda sabemos que los conductores de coches que usaron bicicletas de jóvenes son más empáticos y tienen más cuidado con los ciclistas y con los peatones; lo más importante es crear convivencia y conciencia social", señala Quique Pérez, de la Asociación Pedaladas y profesor del programa Ao INSTIenBici.

Éste se testa actualmente con 50 alumnos de 13 y 14 años (25 estudiantes del IES Sánchez Cantón y otros tantos del Frei Martín Sarmiento) siguiendo un modelo ya aplicado en Reino Unido y que ha habilitado a 2 millones de menores de edad en el uso seguro de la bici. Adaptado a las características del tráfico local, para empezar a la circulación por la derecha, busca como primer objetivo mejorar el conocimiento de las normas de tráfico y la convivencia con los peatones y conductores.

Se desarrolla en cuatro sesiones teóricas y prácticas, fases que hay que superar mediante test para pasar a la siguiente. La última se desarrolla con tráfico real para evaluar el comportamiento de ciclistas y conductores, especialmente en las rotondas, donde se producen la mayoría de los atropellos.

Normativa básica, competencias elementales como el equilibrio, conocimiento de la señalización o paso por conos son algunos de los contenidos de las sesiones.

El plan se limita inicialmente a la zona 30, con la idea de transmitir a los niños que es un espacio seguro en donde pueden circular por la calzada y no se les recomendará salir de este perímetro.

Y es que la mayoría de los escolares que hacen uso de la bici se desplaza por las aceras porque tiene miedo de circular por la calzada, el espacio por el que tienen que transitar las bicicletas.

Hasta el 62% de los estudiantes del IES Sánchez Cantón declara no usar la calzada por miedo, de modo que Ao INSTIenBici se propone dotarlos de habilidades y mejorar su confianza.

El programa también persigue fomentar la movilidad sostenible, reduciendo mediante este vehículo alternativo la contaminación. Como otra meta paralela, se propone fomentar la autonomía de los alumnos, evitando su dependencia de la familia para pequeños desplazamientos entre 2 y 7 kilómetros, si bien la organización es consciente de que en el futuro "solo entre un 10 y un 12% acabará usando la bici" de un modo regular en su vida diaria.

Tras conocerse su puesta en marcha, Ao INSTIenBici ha registrado una elevada demanda por parte de otros centros educativos de Pontevedra y Poio, de modo que la previsión del Concello y de Pedaladas es extenderlo en los próximos dos cursos a la totalidad de los institutos de la ciudad.

La concejala Carmen da Silva agradeció el esfuerzo de Pedaladas y avanzó que se elaborará un proyecto para poder aplicar el programa en el resto de los IES. La idea de la organización es que en 2018 todos los alumnos de los dos primeros cursos ya hayan recibido formación vial y realizado prácticas con tráfico real, si bien esta ampliación "no puede hacerse exclusivamente con voluntarios dada su elevada demanda".