El bajo de la Casa do Pobo de A Insua, en Ponte Caldelas, quedó protegido de las inundaciones que padecía en los peores días de lluvia del invierno. Al estar situado en una pendiente no era raro que el agua llegara a alcanzar el nivel de la placa amenazado la seguridad del edificio, de bajo y dos plantas. El grave problema quedó solucionado con las obras realizadas por el gobierno local y que ayer fueron visitadas por el alcalde, Andrés Díaz.

El gobierno tripartito está comprometido con un plan de mejora de las instalaciones vecinales que hay repartidas por los 33 núcleos de población del municipio. Una veintena de casas del pueblo fueron objeto ya de alguna mejora por parte del Concello y así va a seguir siendo, porque se entiende que estos locales constituyen una valiosa red de actividad y dinamización social. "Queremos que Ponte Caldelas sexa un exemplo en Galicia de atención ás casas do pobo e queremos que estean ben atendidas", destaca Andrés Díaz.