La asociación Pedaladas ha hecho un llamamiento sobre su iniciativa de ciclismo adaptado en la que informa de la necesidad de conseguir más vehículos para poder continuar con acercando el mundo de la bicicleta a toda la población.

"En las últimas semanas, el proyecto de ciclismo adaptado que tenemos junto a Amencer-Aspace y Amizade amplió su base de voluntarios, por lo que tenemos garantizado el proyecto gracias a la ayuda desinteresada de muchos pontevedreses que se sumaron para que los niños y adultos con diversidad física, psíquica y sensorial puedan tener una actividad de ocio relacionado con la bicicleta", explica el colectivo.

Cuando se conoció que Pedaladas estaba llevando a cabo una iniciativa tan solidaria, fueron decenas de personas las que se pusieron en contacto con ellos para ofrecerse a participar en ella. "El número de voluntarios fue tan grande que llegamos a tener más voluntarios que usuarios con posibilidad de montar en alguna de las bicis con las que contamos, por lo que si mantenemos el nivel de voluntariado, el proyecto está garantizado en uno de sus puntos más complicados", reconocen.

Sin embargo, la cuestión más urgente ahora es conseguir vehículos para todos los interesados. Una bicicleta adaptada cuesta entre 1.000 y 6.000 euros, "por lo que están totalmente fuera de las posibilidades de adquisición de las familias de los usuarios, así que es un gran reto encontrar entidades o administraciones que faciliten ayuda para esta movilidad deportiva adaptada".

También colaboran con la asociación el Colegio de Campolongo, que les cede un espacio cubierto en caso de lluvia, y la empresa Rodas Galicia, que les presta varios vehículos.