La zona IVde marisqueo en la Ría de Pontevedra, hasta ahora cerrada cautelarmente, está desde ayer vetada de forma oficial. Intecmar publicó un análisis en el que se confirmaba la aparición de toxinas.
El sector mantenía prohibido el marisqueo a flote desde el 1 de noviembre debido a que es una zona limítrofe a la V, la más interior de la ría, que cerró provisionalmente el primer día del mes ante la presencia de toxinas lipofílicas.
Pese a que desde la Cofradía de Raxó señalan que "el esparcimiento de la biotoxina no es una buena noticia porque para su desaparición es mejor que esté concentrada", no hay pesimismo sobre los períodos de reapertura de las zonas.
La próxima semana
La concentración de toxinas encontradas en los análisis, que están "muy cerca del límite legal para volver a mariscar", hacen ser optimistas a los mariscadores. Miembros de la Cofradía de Raxó confían en que la próxima semana la zona pueda volver a abrir, aunque para que esta reapertura se oficialice"tienen que salir dos muestras negativas".
En principio, Intecmar tiene previstos varios análisis en los próximos días y tan solo un incremento de la concentración haría que la situación pasase de una ligera "preocupación a alarma".
