Los representantes socialistas en los Concello de Valga, Caldas y Pontecesures se reunieron con el diputado Julio Torrado para analizar los planos de la variante de la carretera Nacional 550 y concluir que están en contra, que se trata de un perjuicio para vecinos y comerciantes y que van a emprender acciones políticas en contra, tanto en sus respectivos Ayuntamientos como en el Parlamento y el Congreso.

María Ferreirós, la portavoz del PSdeG-PSOE en el municipio valgués, anima a los vecinos a consultar detenidamente los planos de este vial de 7.293 metros de longitud y presupuestado en 58 millones de euros, "para el que son necesarias 13 obras de drenaje, 5 viaductos, 7 pasos superiores y 5 pasos inferiores".

Cree la edil que "su construcción no está justificada y se trata de un gasto innecesario", de ahí su oposición y el llamamiento que hace a los vecinos.

Los socialistas, que ya están recibiendo a los vecinos para explicarles su parecer y el proyecto, detallan que la carretera propuesta por Fomento "comienza en un tramo de subida de aproximadamente 2 kilómetros con una pendiente del 5%" desde su punto de conexión con la variante de Padrón, a la altura del nudo de enlace de la autopista.

Trazado cóncavo

En su parte final "hay un trazado cóncavo con una inclinación, primero de bajada, en un 5%, y después de subida, de otro 5%; y no se aprecian las dos conexiones de salida hacia la N-550 en la rotonda de Chanteclair y Bronllo, que alcanzan también el 5% de pendiente".

La propia Ferreirós, que por cierto, en su perfil social en Facebook dice sentirse "decepcionada" y "no representada" con la abstención del PSOE que permitió la investidura de Mariano Rajoy, puntualiza que los cálculos del volumen de tráfico por la N-550 se fijan en el horizonte del año 2051, "y se presupone un crecimiento mayor del 50%, pasando de los 6.799 vehículos de 2012 a 14.520, pero sin embargo en el propio documento se reconoce que los datos obtenidos con mediciones reales no son estos".