Los desencuentros entre el equipo de gobierno dirigido por Gonzalo Pita y las opiniones de Roberto Agís como concejal no adscrito son cada vez más habituales.

En el pasado pleno, Agís expuso varios problemas de diversa índole a los que, según él, el gobierno local no se ofreció una respuesta adecuada.

El lunes, el concejal no adscrito expuso el problema del edificio Herpi, una construcción que "nunca se debió hacer", pero que además "no tiene abiertos los bajos al público, como sí debería". Agís preguntó por la "situación legal" del edificio, pero no se le respondió porque "el alcalde dijo que no estaba en el orden del día".

Otro tema a tratar fueron las arquetas pluviales de la Avenida de León, sobre las que "las denuncias en el concello no recibieron respuesta". Asimismo, Agís expuso la opacidad que tuvo la organización de la Feria de Artesanía de Portonovo y la falta de un consejo de administración en el organismo autónomo Terra de Sanxenxo, a lo que el alcalde respondió que "la empresa funciona igualmente".

El concejal señaló ayer que a esto se le unía "la actitud prepotente de ciertos miembros del gobierno, por lo que el señor Pita y los demás ya están avisados. Y el que avisa no es traidor, porque se acaban yendo".