La Comunidad de Montes de O Salgueiral, la más afectada en el municipio de Pontevedra por los incendios del pasado verano, aprobó en su última asamblea general personarse en la investigación policial y en las diligencias que se deriven de estos fuegos, dado que todos los indicios apuntan a que han sido provocados. Además la asamblea de comuneros decidió instar a las administraciones públicas a colaborar en las "actuaciones urgentes" necesarias para proteger el suelo quemado y restaurar las zonas afectadas, para prevenir daños mayores.

Otro acuerdo de esta asamblea vecinal, que logró la participación más alta que se recuerda de comuneros -según explica la junta directiva que preside José Bravo- es elaborar un informe de daños y perjuicios causados por los últimos fuegos, así como poner en marcha un Plan de Acción Comunitaria de apoyo a los propietarios particulares de fincas forestales, para poder iniciar cuanto antes la restauración ambiental de las mismas.

Plan comunitario

Este plan comenzará -explica la directiva de la comunidad-, ofreciendo asesoramiento técnico a los vecinos de O Salgueiral. Este Plan de Acción Comunitaria permitirá conocer la realidad de las propiedades particulares "tan alejada de la que recoge el Catastro" apuntan, así como desarrollar sus posibilidades de aprovechamiento de una forma conjunta. Para ello se comenzará por las zonas quemadas y las más próximas las viviendas y núcleos habitados. Se recopilará la documentación de las fincas, se trazará su realidad geográfica y se realizará una encuesta a los dueños de los predios para conocer sus usos pasados y el interés de los propietarios por los nuevos aprovechamientos. Una segunda fase será la planificación de actuaciones y finalmente, su puesta en marcha.

La asamblea de la Comunidad de Montes de O Salgueiral fue convocada con el objetivo de evaluar los efectos del incendio forestal que sufrió el monte vecinal en los pasados meses y también las acciones a realizar después del mismo.

Este fuego arrasó parte del monte vecinal de Bora diez años después del incendio devastador de 2006, que se llevó por delante todo el monte que ahora la comunidad estaba recuperando.

El incendio de este verano afectó a casi setenta hectáreas de las cuales más de cuarenta corresponden a monte vecinal y las restantes a propiedades particulares.

Tiene especial importancia por su valor medioambiental y paisajístico, según indica la directiva de esta comunidad de montes, la pérdida total de un rodal de cerca de diez hectáreas en las márgenes del río Almofrei.

En este terreno se llevó a cabo durante los últimos años, con la colaboración del programa Monte Vivo del Concello de Pontevedra, la sustitución del eucalipto por especies de ribera. También resultaron afectados tres kilómetros de sendero de la Senda do Almofrei que esta comunidad de montes inauguró en el año 2010.