La sentencia establece probado que los 14 acusados condenados por tráfico de drogas se concertaron, bajo las órdenes de Ramiro Vázquez Roma, para introducir un importante alijo de cocaína en octubre de 2007, siendo avistadas por el helicóptero de Aduanas las lanchas rápidas cargadas con fardos. Al detectar la presencia de la aeronave las dos embarcaciones intentaron huir, poniendo una de ellas rumbo a la ría de Pontevedra (embarrancando en la playa de A Mourisca, en Bueu), y otra hacia la de Arousa, varando en Porto Meloxo pero no sin antes arrojar los fardos al mar. De esta lancha se recuperaron únicamente 60 fardos con 324 kilos de droga. En la playa de Bueu se decomisaron unos 2.562 kilos con una pureza de un 70%. La droga estaba valorada, según la sentencia, en unos 90 millones de euros. El fallo todavía es recurrible ante el Tribunal Supremo.