El asado de un cordero acabó con la necesaria presencia de los bomberos para ventilar un poco un edificio al mediodía de ayer en Eduardo Pondal. Todo ocurrió cuando los vecinos de un inmueble de esta calle detectaron una cantidad de humo en el edificio que les llamó la atención y causó cierta alarma por lo que decidieron avisar al parque de bomberos. Cuando los servicios de emergencias llegaron, se dieron cuenta de que se trataba de una falsa alarma dado que todo el humo procedía del asado de un cordero que estaban llevando a cabo dos personas de origen magrebí. Con todo, se generó una importante humareda y de hecho los bomberos tuvieron que ventilar. La comunidad islámica celebra estos días la fiesta del cordero.