La empresa Pérez Torres anunció ayer la adquisición de una nueva grúa para hacer frente al incremento de la actividad en el puerto provocado por la llegada de nuevas navieras. La principal de ellas, Maersk, se trasladó desde Vigo para aprovechar los menores costes que ofrecía Marín, reportando un mes de julio histórico en cuanto al tráfico de contenedores.

Los buques de la empresa danesa hicieron crecer la actividad del puerto de Marín en este aspecto en un 45,9%. Con Maersk en su nueva ubicación, Marín movió durante julio unos 2.000 contenedores más que el mes anterior.

El temor en la ciudad olívica se dispara ante la posible salida definitiva de Maersk en el mes de diciembre.

La compra de este nuevo equipamiento para Pérez Torres se enmarca dentro del plan de inversiones que la empresa realiza con la intención de reforzar su capacidad operativa en la terminal de contenedores marinense. De este modo incrementará su capacidad para operar buques de grandes dimensiones, de acuerdo, señaló Pérez Torres, con la tendencia de los armadores de aumentar el tamaño de sus flotas.

La nueva grúa será del tipo Post-Panamax, las tradicionales para el traslado de contenedores de gran tamaño. Con ella serán tres las máquinas de este estilo con las que cuente la empresa en Marín.

Pérez Torres explicó que será trasladada desde el puerto italiano de La Spezia hasta Marín en un buque especializado en el transporte de cargas sobredimensionadas el próximo mes de octubre.

La compañía tendrá operativa la nueva equipación a partir del mes de noviembre.