Vigilancia y control sobre los montes, además de medios efectivos para atajar los conatos que se produzcan, son las medidas urgentes que tanto comuneros como alcaldes de la comarca demandan para evitar incendios forestales como los que hace dos semanas han devastado los montes de la provincia. En la necesidad de prevenir y de dotar de medios a los servicios que se encargan tanto de la seguridad como de la extinción coinciden tanto alcaldes como vecinos y propietarios del monte. Pero al margen de las medidas más inmediatas para evitar nuevos desastres, piden políticas a largo plazo para empezar a poner fin al mal endémico de los montes gallegos.
La Mancomunidad de Montes de Pontevedra ha convocado una asamblea de comunidades, que se celebrará mañana en O Salgueiral (Bora), para analizar lo ocurrido en las últimas semanas en los montes de la comarca y presentar propuestas de actuación a las administraciones públicas. Entre éstas, reclamarán que se haga cumplir la normativa relativa a distancias de seguridad entre masas forestales y viviendas o núcleos habitados, que se favorezca un plan de reforestación con especies que contribuyan a evitar la propagación del fuego, que se apliquen los tratamientos silvícolas necesarios para reforestar los montes en mejores condiciones que hasta ahora, o que se trabaje en la concienciación y la formación de la ciudadanía sobre la importancia de proteger las masas forestales.
Frente común
Algunos miembros de esta Mancomunidad de Montes también llevarán a la asamblea la propuesta de organizar un "frente común" con otras mancomunidades y organizaciones de comuneros de Galicia, para reclamar ser tenidos en cuenta por las administraciones públicas a la hora de planificar las políticas que afectan a los montes.
En este sentido, el presidente de esta mancomunidad, Iván Pérez, recuerda que aproximadamente el 96 por ciento del monte es comunal, por lo que "no se comprende que las administraciones públicas dejen al margen a los comuneros al diseñar políticas para los montes".
Por su parte, los comuneros de O Salgueiral, la zona más afectada por los incendios de este mes en el municipio de Pontevedra, siguen esperando a ser consultados por alguna de las administraciones con competencias en política forestal para hablar de las consecuencias y las medidas a tomar, frente a un suceso que ha echado al traste nueve años de trabajo en la recuperación de 70 hectáreas de monte de esta parroquia.
Esta comunidad ha convocado también una asamblea vecinal, que se celebrará el 18 de septiembre, para valorar lo sucedido este mes y apuntar medidas a emprender.
Concello de Pontevedra
En cuanto a los representantes municipales, la teniente de alcalde de Pontevedra y concejala de Seguridad, Carme da Silva, recordó que es la Xunta de Galicia la administración que tiene las competencias en materia forestal, si bien el Concello de Pontevedra viene trabajando desde hace muchos años con las comunidades de montes del municipio, en un plan de recuperación del terreno denominado "Monte Vivo".
Precisamente este plan ha servido de modelo para el que ahora impulsa la Diputación de Pontevedra con los ayuntamientos de la provincia, al que se sumará el Concello de Pontevedra.
La Xunta de Galicia ha anunciado en una reciente reunión con responsables municipales, un plan de actuación contra los incendios forestales dotado de ayudas económicas y medidas de vigilancia como la instalación de cámaras. "Cuando haya un plan real lo estudiaremos, como todos los que nos presentan, y las ayudas las podremos valorar cuando estén publicadas en el DOG, porque por el momento no hay nada", explicó Carme da Silva.
