Los niños participantes en el programa de conciliación "Paifillonai" experimentan estos días una jornada diferente, con doble vertiente: lúdica y reivindicativa. Por una parte los jóvenes escolares dedicaron algunas horas de la semana pasada a la elaboración de unos pequeños llaveros, con la forma de la huella de un perro, que comenzaron a regalar en Portonovo, junto al puesto de venta de limonada instalado en el mismo paseo de Rafael Picó. El objetivo es recaudar fondos para la Protectora de Animales de Cambados.

Desde el puesto fijo, que el miércoles volverán a sacar a la calle, los pequeños realizan una labor comercial acercándose a los establecimientos para ofrecer su producto, al igual que lo ofertan a los transeúntes que se encuentran en el parque del Espiñeiro.

Será el día 12, a las 11 horas, cuando los alumnos del "Paifillonai" reciban la visita de la Protectora de Animales de Cambados.