Las sesiones plenarias municipales "interminables" van camino de convertirse en una costumbre. Después del pleno del pasado lunes, en el que buena parte de las propuestas de la oposición quedaron sobre la mesa por "cansancio" de los concejales, el portavoz del PP, Jacobo Moreira, anunció ayer que su partido contraatacará con la misma moneda. En el pleno del lunes el BNG presentó una amplia batería de mociones, que Moreira calificó de "nimiedades" y que ocuparon buena parte de la sesión, por lo que el PP acusó ayer a Lores de "saturar" el orden del día para evitar debatir las propuestas de la oposición.

Sobre esa base, los populares ya han presentado, para el pleno del próximo mes de agosto, una extensa relación de escritos, hasta un total de 28, que denuncian los incumplimientos del gobierno local en lo que se refiere a las 90 medidas urgentes que se planteó como meta para sus primeros cien días de mandato. Pasado más de un año desde la toma de posesión, el PP ha localizado al menos una treintena de asuntos que no avanzaron pese a que en julio de 2015 eran "urgentes" para el BNG.

Y todos ellos será objeto de su propia propuesta de debate. Con un texto básicamente similar en todos los casos, se insta al gobierno local a cumplir sus propios objetivos en asuntos como las "lineas estratégicas de promoción y proyección de la ciudad", "mejora de la calidad urbana" en especial en barrios no mejorados hasta ahora, la "elaboración de un plan de actuación en el entorno de colegios y centros sanitarios", la compra de la finca de Malvar, el acondicionamiento de las cubiertas sobre el tren, la conversión del puente del ferrocarril de Monte Porreiro en peatonal, obras en Marcón, Pontesampaio, Santa María de Xeve, Bora o Mourente, la convocatoria del concurso para la gestión de las piscinas de Campolongo, mejoras en los pabellones, el proyecto de la planta de compost y el nuevo sistema de recogida de basuras o la mejora de los atrios de Santa Margarita y San Mauro. Se trata de medidas que el BNG anunció para sus primeros cien días de mandato pero que todavía no se han cumplido, un año después.