La Evaluación de los Edificios se considera el método más eficaz para comprobar el estado no solo de la estructura o la cubierta, sino también de las instalaciones eléctricas, de aguas, gas y telecomunicaciones. La Ordenanza de Evaluación de los Edificios afecta a todos los inmuebles de más de 50 años de antigüedad o que vayan cumpliendo esa edad de forma paulatina. Deber realizarse también la revisiones periódicas cada diez años una vez superada la primera inspección. Son exámenes únicamente visuales y solo en el caso de detectarse deficiencias puede ordenarse alguna prueba complementaria para determinar la gravedad. En caso de emitirse informe con recomendación de obras, los propietarios tienen dos meses para presentar la solicitud en el Concello y el incumplimiento supone la apertura de un procedimiento de disciplina urbanística por falta leve.
La ordenanza de inspección técnica de edificios no solo debe incluir un certificado de seguridad sino también analizar aspectos en materia de eficiencia energética, unos requisitos que en muchos casos no cumplen en la actualidad residencias antiguas.
Sin subvenciones
Además, con la obligación de los propietarios de contratar a técnicos privados para realizar la revisión, el PP pidió en su día al gobierno local que establezca algún tipo de linea de ayudas o subvenciones para sufragar parte de esos gastos, pero hasta el momento no se han habilitado. En cambio, sí se establecen posibles multas. Aunque por el momento no se quiere acudir a las sanciones la ordenanza califica la desobediencia como infracción urbanística leve, que podría serán sancionada con multa de 300 a 6.000 euros, junto con posibles órdenes de ejecución para "la reposición de la legalidad urbanística. El pasado año se requirió al menos por segunda vez a 128 propietarios a presentar el certificado al incumplir el plazo inicial.
