El servicio de Medicina Preventiva del CHOP trabaja codo a codo con el de Medicina Interna. Juan Carlos Rodríguez, jefe de este último servicio, recuerda que todos los viajeros que van a viajar a países en los que hay enfermedades de riesgo como la malaria deben ir vacunados y asesorados. En este sentido, aconseja contratar seguros médicos. "Incluso para ir a Europa, un seguro médico se debe hacer. Con más razón para ir a países de Asia, África o Latinoamérica. Tiene que incluir la repatriación en caso de enfermedad grave", indica.
"Los protocolos de prevención varían dependiendo del paciente y del tipo de viaje. Lo ideal es comenzar con unos tres meses de antelación", informa.
Repelente de insectos
El botiquín básico que debe llevar el viajero debe incluir antiinflamatorios y antitérmicos, también desinsectante, "el mejor es el DEET, con una concentración de entre un 20 y un 45 por ciento" y que debe aplicarse cada cuatro horas en las zonas de piel descubierta.
No está de más, incluir en la maleta, la quinolona para la diarrea, un antibiótico. "También penicilina, dependiendo de las circunstancias".
Al regreso del viaje, salvo que uno esté perfecto, hay que hacerse una revisión general. "El período de máximo riesgo son cuatro semanas". Los síntomas que nos deben encender la alarma son la fiebre, las hemorragias y las manchas en la piel, según el jefe del servicio de Medicina Interna.
