Un guarda forestal de la Xunta de Galicia y un vecino han resultado condenados por la Audiencia de Pontevedra como autores de sendas faltas de lesiones por una pelea que ambos protagonizaron a cuenta de una quema forestal en una localidad de la provincia de Pontevedra.

La Sección Cuarta del tribunal provincial acaba de confirmar el fallo impuesto en su día por un tribunal de primera instancia en la que se le impone al agente forestal una pena de 30 días de multa a razón de 9 euros diarios, es decir 270 euros, y al vecino a una pena de 45 días a razón de siete euros, lo que suma un total de 315 euros. Además, se le impone una indemnización al guarda forestal de 200 euros que deberá abonar al otro acusado en materia de responsabilidad civil.

Los hechos se produjeron en cotubre de 2014 cuando el agente forestal de la Xunta se encontraba desempeñando su actividad profesional y observó una columna de humo en un lugar próximo. Entonces se dispuso a comprobar su origen, así como que los autores del fuego dispusieran de la documentación preceptiva para realizar esta quema. El otro acusado, que se encontraba en las proximidades, se apercibió del movimiento del agente forestal y decidió alertar previamente a los responsables de la quema que generaba este humo, para lo que se desplazó en su motocicleta hasta llegar al lugar, Una vez allí, y al coincidir ambos, el agente forestal espetó al vecino. "Qué fas aquí, chivato?" a lo que el segundo respondió con insultos. Entonces, el agente foerstal se encaró con el vecino a lo que este respondió con insultos lo que motivó que ambos se agrediesen recíprocamente, según se recoge en el fallo.

El agente forestal propinó un puñetazo en la cara, en la boca y en su lado derecho y patadas en las piernas, mientras que el vecino asestó a su contrincante varios puñetazos y arañazos en la cara. AMbos mantenían una mala relación con carácter previo a este incidente.