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El futuro reglamento del Mercado incluirá el alquiler de puestos vacíos por 24 o 36 meses

Falta por concretar el plazo que sirva de alternativa a los 25 años de concesión

El gobierno local, que pretende revitalizar el Mercado de Abastos con el alquiler de los puestos vacíos, se plantea que esta modalidad se establezca por 24 a 36 meses. A falta de definir el plazo concreto, se considera que este sistema sería más atractivo para nuevos emprendedores que la actual concesión por 25 años. El borrador de nueva normativa de funcionamiento de la Plaza de Abastos, cuya redacción está prácticamente ultimada, apuesta por este formato, de modo que ese alquiler sea un "periodo de prueba" para después asumir una concesión tradicional si su actividad tiene éxito.

El reglamento en redacción por parte del departamento que dirige el concejal Vicente García Legísima, podría reactivarse en cuestión de semanas y entregarse a los vendedores para su primer análisis, aunque no de forma oficial, con exposición y alegaciones por el momento.

También se planteará en ese texto el sistema para desalojar la planta alta, de modo que todos los puestos se concentren en la baja y destinar el espacio disponible a nuevos usos que atraigan a más clientela, el Concello se plantea desplazar de su actual ubicación la lonja que se celebra cada madrugada. El emplazamiento alternativo es un pasillo lateral de la planta baja, destinado en su día a congelados y ahora casi sin uso.

La idea es convertir ese espacio, con un amplio ventanal hacia el río, en escenario de ofertas totalmente distintas a las actuales. Propuestas hosteleras, con una terraza a modo de mirador, iniciativas lúdicas vinculadas a los nuevos aprovechamientos previstos para la planta alta son algunas de las ideas que maneja el gobierno local para la planta alta. Ese piso superior apenas alberga ahora casetas ocupadas, más allá de los puestos de fruta, otros productos y dos cafeterías. Precisamente estos dos locales son los de casi imposible traslado a otra ubicación del Mercado, pero su continuidad en el espacio actual no sería incompatible con el aprovechamiento al que aspira el Concello.

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