Los trabajadores del Parque de Maquinaria de la Diputación de Pontevedra representados por CC OO mantienen las movilizaciones con el objetivo de reclamar "diálogo" con el gobierno provincial. Quieren negociar los horarios de trabajo y las condiciones salariales, modificadas por el nuevo ejecutivo que preside la socialista Carmela Silva, además de conocer dónde se va a ubicar el Parque de Maquinaria a partir de 2018, fecha en la que expira la concesión del suelo que ocupa en la marisma de Alba.

El próximo sábado realizarán una marcha a pie desde Pontevedra hasta Vigo, para protestar ante el Concello de esta ciudad, donde es concejala la presidenta provincial, Carmela Silva. Con esta caminata (que aún no tiene autorización de la Subdelegación del Gobierno) quieren demostrar que su lucha no va a concluir "por cansancio físico", como temen que pretende el gobierno provincial.

Los portavoces de CC OO José Ramón Piñeiro y José Luis García Pedrosa denuncian que el gobierno de la Diputación tiene una "hoja de ruta" dirigida a privatizar este servicio, a base de lograr que el Parque de Maquinaria no funcione. Por eso -explicó Piñeiro- la Diputación renuncia a prorrogar la concesión de los terrenos que ocupan las instalaciones ni buscan unas nuevas. Mientras -añade el portavoz sindical- el gobierno de la Diputación se dedica a "desprestigiar" a los trabajadores y "criminalizar" al sindicato.

Sueldos

CC OO ha iniciado también una pegada de carteles, con 5.000 ejemplares que distribuirá por toda la provincia, en los que expone los sueldos del vicepresidente Mosquera y la presidenta Silva, 90.000 y 85.000 euros respectivamente, "además de chófer particular, con 2.200 euros al mes, más el gasto del propio coche", añaden los portavoces sindicales.

Según el sindicato, con el horario de 8.00 a 15.00 horas impuesto por el nuevo gobierno provincial a los trabajadores del Parque de Maquinaria (con lo que dejan de cobrar complementos por desplazamientos, dietas de comidas y pernoctaciones), "se pierde media jornada de trabajo", ya que los operarios que trabajan en cualquier punto de la provincia tienen que esperar "de brazos cruzados" a que llegue el conductor desde el Parque de Maquinaria de Pontevedra, que vuelve a perder tiempo de trabajo en el regreso a la base.

Despilfarro

Mientras, el trabajo que no se lleva adelante con los funcionarios del parque se tiene que resolver contratando a empresas privadas, con lo que se está produciendo "un doble gasto, un despilfarro", indican, en un camino que lleva al objetivo de acabar privatizando por completo el servicio.