El gobierno local de Marín impulsa con la Xunta de Galicia el convenio de colaboración para contratar la obra del pabellón de deportes de Seixo. Se trata de uno de esos temas de actualidad que "conjuntamente con la variante, el centro de salud, el auditorio y otros llevan muchos lustros de propuestas, contra propuestas y pocas decisiones en firme", como explica la alcaldesa, María Ramallo. "Lo fácil en la vida es no decidir, pero la gestión pública y las posibilidades de hacer cosas requieren decisiones; lo contrario conlleva que los temas se toquen de refilón, se utilizan globos sonda y se hable y se vuelva a hablar, para al final quedarse en el tintero de lo cómodo y lo más fácil, que es no hacer nada", añade Ramallo.

La regidora recuerda que en estos pasados meses se han dado pasos, se han hecho estudios y ahora se están haciendo gestiones para llevar el proyecto adelante.

En los últimos meses, el gobierno local llevó al pleno de la corporación esta iniciativa. Se elaboró además una Memoria valorada, se estudiaron técnica y deportivamente todas las posibilidades "y por la que se ha apostado y decidido es la mejor para la instalación y para que su ejecución sea una realidad lo antes posible", apunta la regidora local. Ramallo recuerda además que se estudió seguir comprando terrenos, variar el plan general y añadir terrenos del actual patio del colegio. También se estudiaron las posibilidades del actual campo de fútbol de tierra para ser convertido en un campo de hierba artificial, y se alcanzó la opción ahora propuesta, que es ubicar una zona deportiva con pabellón en los terrenos del campo y plantear por fases la ejecución de pistas al aire libre y zonas de esparcimiento.

"Esa es la realidad de la cuestión y estimamos que las demás opciones no son factibles, ni posibles y empeñarnos en lo difícil e imposible es reincidir en errores y en no ejecutar una demanda que cumple ya demasiados años", añade Ramallo. Así, el equipo de gobierno local y las áreas de deportes y urbanismo sigue dando pasos en este proyecto, porque "seguir dando vueltas y empeñarse en opciones imposibles, es redundar en una frustración".