Como resumen de las intervenciones de la Policía Local llevadas a cabo el pasado año para combatir el menudeo de drogas y su consumo en espacios públicos, desde la Jefatura se señala que fruto de esta actividad de controles preventivos se procedió a interponer ante la Subdelegación del Gobierno un total de 158 denuncias por tenencia o consumo de estupefacientes.

Asimismo, se procedió a la imputación de 21 personas por delitos de tráfico de drogas, de los que 19 fueron arrestados y dos imputados.

13.580 euros incautados

Estas actuaciones permitieron aprehender cerca de kilo y medio de hachís, 391 gramos de cocaína, dos gramos de éxtasis (MDMA), cien unidades de pastillas de distinto tipo, 164 gramos de marihuana, 110 gramos de sustancia de corte, 0,5 gramos de heroína y 13.580 euros procedentes supuestamente de actividades de menudeo de drogas, lo que demuestra que se trata de un negocio en el que se gana fácilmente dinero aún a costa de la salud de los consumidores de estas sustancias. Aparte, se incautaron de varias balanzas de precisión y teléfonos móviles.

Locales permisivos

Otro de los ámbitos en los que centra su actuación la Policía Local es en vigilar aquellos locales que puedan ser permisivos en el consumo o incluso trapicheo de sustancias estupefacientes. En el pasado se han llegado incluso a clausura establecimientos en los que se era tolerante con las drogas.

En este sentido, la labor de control policial sobre los establecimientos de ocio nocturno no se ciñe solo a las drogas, sino que también se controla la venta de alcohol a menores, que está prohibida.

Una vigilancia que extienden a los "24 horas" y otros establecimientos en los que los jóvenes suelen comprar alcohol para practicar botellón.