En Marea pedirá al Senado que apruebe una moción en la que se inste al Gobierno a paralizar de forma inmediata las obras que ya están en marcha para construir el primer tramo de la A-57. Una moción en la que también piden que se renuncie a este proyecto devolviendo la sierra de A Fracha a su estado original (actualmente ya se ha eliminado abundante vegetación y temen que en breve comiencen los primeros desmontes) y que se libere el peaje de la AP-9 con el fin de que este vial sí pueda ejercer la función que, a su juicio, debe tener como circunvalación de Pontevedra.

Un papel de circunvalación que, aseguran, no juega la actual A-57, una autovía que va "de ningures a ningures", explicó el portavoz de Marea de Pontevedra, Luis Rei. La entrada y salida de este vial están a siete kilómetros del casco urbano de la ciudad y además que costará en su conjunto más de 600 millones de euros. En este primer tramo pontevedrés, el coste será de unos 10 millones de euros el kilómetro por lo que aseguran que además de una "infraestructura inútil" representará un "gasto de dinero público inaceptable" sin olvidar "un impacto ambiental realmente destructivo". Rei recordó que "con lo que cuestan dos kilómetros de esta autovía se podría sanear la ría de Pontevedra, ahora moribunda".

La encargada de llevar esta moción al Congreso es la senadora por En Marea Vanessa Angustia, quien lamentó que el Gobierno todavía no le haya facilitado el expediente de contratación de esta obra a pesar de que fue "lo primero que pedí" nada más recoger su acta de senadora.

Angustia también alertó de que la construcción de esta autovía no es un problema local, constreñido a la ciudad de Pontevedra, sino que se está extendiendo ya a otras localidades como es el caso de Barro, dado que el trazado previsto une el nudo de Curro y O Confurco. La senadora de En Marea cree que la intención de Fomento a la hora de construir en primer lugar dos tramos inconexos entre sí (Vilaboa-A Ermida, en Marcón; y Curro-Xeve) tiene como objetivo procurar que en esta última parroquia pontevedresa tenga que "aceptar el trazado que finalmente les venga impuesto" para conectar los otros dos viales ya construidos. Pero es que además, desde En Marea alertan de los planes el gobierno, plasmados en la última ley de carreteras, de convertir esta autovía en una alternativa sin peaje a la AP-9 que llegue hasta A Coruña duplicando ladel Atlántico que ellos abogan por liberalizar. Dicen que el coste de la infraestructura bastaría para rescatar la concesión y no causar mayor impacto.

Vanessa Angustia también habló asimismo del impacto social que tendrá el tramo que se ejecuta ahora en Pontevedra. "Ya se dividió en dos partes al pueblo de Placeres y ahora queremos hacer lo mismo" con Pintos y Marcón, subrayó.

El acto de presentación de esta moción contó con la presencia de Bibiana Piñeiro, de la plataforma Salvemos A Fracha, quien indicó que actualmente este espacio natural se está convirtiendo en un "escenario dramático y desolador" a causa de las obras para construir esta autovía.