Tras el cese de Silvia Díaz en el gobierno local deja un panorama político inusual en Poio, ya que por primera vez en los últimos veinte años la oposición no estará conformada únicamente por el PP. La que había sido la responsable de Cultura en los últimos nueve años y portavoz del BNG en el gobierno deja un hueco que el bipartito que supone un "ligero" cambio en las fuerzas, ya que BNG (6 concejales) y PSOE (3) mantienen la mayoría absoluta (PP tiene 7 ediles y 1 el grupo mixto con Díaz).

En cuanto a la oposición, tampoco parece que este cambio lo refuerce. "Sigo compartiendo el mismo programa electoral con el que me presenté dentro del BNG en las elecciones y en el cual colaboré en su redacción", señalaba Díaz, afirmando que seguiría "siente donde me siente, teniendo de frente al PP", aunque matizando que apoyaría "cualquier iniciativa, independientemente quien la presente, que sea buena para los vecinos de Poio". La organización del BNG fue quien rechazó la propuesta de la propia edil de continuar en el gobierno local como independiente.

Con la intención de "acabar los tres años de mandato como edil no adscrita", Díaz definía su nuevo papel en corporación en el que debutará en el pleno de mayo en la oposición luego de que este martes se presente el decreto de su cese del BNG y su entrada dentro del grupo mixto.

"En Poio tenemos muchos frentes abiertos pero lo más delicado, lo que habría que priorizar, es la depuradora. Habría que buscar la ubicación más idónea para dar un paso hacia el saneamiento de la ría", comenta Díaz. La concejala mantiene que los vertidos de Raxó y Sameira "no son el principal problema del saneamiento de la ría" y pide que "la Xunta ponga cartas en el asunto". "El deterioro de la ría es insostenible y hay que tomar una decisión valiente para acabar con un gran problema", afirmó Díaz. Dentro de otros problemas, destaca también la necesidad de aceras en la PO-308 y en Campelo para evitar los continuos accidentes. "Todo el tramo hasta Sanxenxo necesita una solución para mejorar la seguridad vial", apuntó.

Sin olvidar que fue responsable de Cultura y la defensa de la lengua gallega, "un área que me marcó mucho", sus trabajo no se limitará a este campo. "Estoy a disposición de los vecinos para defender sus reivindicaciones legítimas", señaló.

Cuestionada por los proyectos que tenía en marcha en su etapa en el Concello y que dejará tras su marcha inconclusos, Díaz apuntó al PoioEscena. "Tanto los teatros como los monólogos espero que sigan creciendo en Poio. Espero que continúe una programación de teatro fuerte y que siga acompañando la aceptación del público, que también aumentó en los últimos años", concluyó.