Legísima estudia la posibilidad de sacar a subasta o adjudicación los 30 espacios de Rafael Areses que no se cubren, así como reorganizar la ubicación de los puestos para evitar huecos entre unos y otros. La posible subasta de permisos se efectuaría, en todo caso, de forma escalonada para impedir que alguna cooperativa cope todos los puestos. Esto es lo que ocurría hace una década, cuando comenzó un tenso enfrentamiento entre el gobierno local y el cabecilla de los vendedores de etnia gitana, que acabó meses después con la marcha de este colectivo, que encontró en Barro una alternativa a la capital. Desde entonces, cada domingo se celebra una feria en el vecino municipio, si bien ya hubo problemas que provocaron una suspensión temporal de la celebración.

El último intento de reactivar la feria se produjo en enero de 2010, cuando se acordó modificar las fechas de celebración. Se abandonaron los tradicionales días 1,8, 15 y 23 de cada mes y se acordó desarrollar el mercadillo cada sábado. La Asociación de Vendedores Ambulantes de Galicia ha reclamado en numerosas ocasiones una potenciación de la feria pontevedresa y la subasta de todos los puestos.