El Tribunal Supremo acaba de confirmar la condena de cinco años de prisión impuesta en marzo de 2015 por la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra al narco arousano Roberto Leiro Santos por blanqueo de capitales procedentes del narcotráfico. Asimismo, también ratifica la misma pena impuesta por el mismo delito para su mujer, María Teresa S. C. El Supremo, no obstante, sí modifica la sentencia para rebajar ligeramente la multa en cien mil euros impuesta a cada uno de ellos, de tal forma que Leiro Santos pasa a estar condenado al abono de una multa de 1,5 millones de euros y su mujer a 1,4 millones.

El fallo rebaja la cantidad supuestamente blanqueada por Leiro Santos a 475.000 euros, frente a los cerca de 590.000 que indicaba la Audiencia de Pontevedra en su sentencia inicial. Considera que no quedó probado que el dinero empleado en la adquisición de una finca en Vilagarcía así como una serie de ingresos bancarios procedieran del tráfico de drogas. Sí confirma que tenían su origen en el narcotráfico las inyecciones económicas que realizaron en las tres tiendas de deportes que abrieron en Cambados y Pontevedra o la compra de un ático y un local comercial en Cambados que pusieron a nombre de algunos de sus familiares para los que también se confirma la condena, concretamente una hija y los suegros de Leiro Santos.

El fallo también absuelve a una de las hermanas de la mujer de Leiro Santos y al marido de esta, María del Carmen S. C. y Juan T. V., que habían sido condenados a 6 meses de prisión como autores de un delito de blanqueo de capitales por imprudencia.

El Supremo ratifica el resto de los pronunciamientos de la sentencia que incluía también la condena a tres años y medio de prisión para la hija de Leiro Santos, Nuria L. S., y de los suegros del cambadés.

Leiro Santos fue condenado en dos ocasiones por narcotráfico, tal y como recoge la sentencia de la Audiencia de Pontevedra. Durante el juicio en Pontevedra en marzo del pasado año, Leiro Santos aseguró que nunca ganó un céntimo con el narcotráfico, alegando que las dos únicas veces que se metió en este negocio acabó siendo detenido. Al fiscal antidroga de Pontevedra, Luis Uriarte, no dejó de sorprenderle esta afirmación y explicó al tribunal que Leiro Santos no podía ser un mero principiante en el mundo del narcotráfico. La primera condena que se le impuso, de 4 años y medio de prisión, fue por su relación en el que todavía es el mayor alijo de hachís incautado en España, las 36 toneladas de hachís del Volga I que estaba atracado en el puerto de Marín en 1996. La segunda, de 13 años y medio de cárcel, fue por los alijos de 2.000 y 3.734 kilos de cocaína del South Sea, en 2003, una operación en la que se le señala como líder de la organización en esta sentencia y que también significó la caída de Marcial Dorado.