La xunta de goberno local aprobó ayer el convenio entre el Concello de Poio y la Xunta de Galicia para contratar a los operarios de la campaña anti incendio del verano. Los trabajos se realizarán durante tres meses y ocuparán a seis trabajadores forestales y el servicio de una motobomba y un tracto desbrozadora.

El acuerdo sigue la misma fórmula que la de años anteriores, con la diferencia de que ahora el convenio se suscribe por tres años y no por uno, como se hacía hasta ahora.

La administración autonómica, a través de la Consellería de Medio Rural, y el Concello de Poio, asumen el coste de este servicio a partes iguales. El convenio es por un total de 60.000 euros, según indicó ayer el alcalde de Poio, Luciano Sobral.

El Concello se compromete a facilitar al grupo todo el material de seguridad y de comunicación, así como las herramientas precisas para acometer la extinción de incendios forestales. La puesta en marcha de este grupo de acción será en el mes de julio.