La PO-542, entre O Pino y Bora, registra cada día una media de uso de algo menos de cinco mil coches, una cifra que se mantiene estable desde hace años. Sin embargo, es el vial autonómico de la comarca que soporta más tráfico pesado, ya que uno de cada diez que pasan por él son camiones. Ese porcentaje incluso aumenta entre enero y abril. Se trata de uno de los principales trayectos de camino a los parques empresariales de O Campiño y A Reigosa para el tráfico que procede del sur de la provincia. Dispone de un tramo de un par de kilómetros con cuatro carriles, que se ejecutó como acceso al hospital de Monte Carrasco que se ideó en su día en Marcón, pero nunca ejecutado. No se descarta que la Xunta renuncie ahora a su construcción y recupere la ampliación de Montecelo.

Esta alternativa de la PO-542 para los camiones podría desaparecer una vez que entre en servicio el primer tramo de la circunvalación de Pontevedra, entre Vilaboa y Marcón, que presenta un recorrido parecido, desde la AP-9 y la N-550 hasta la carretera de Ponte Caldelas.

Este último vial, la PO-532, registra un tráfico diario medio de 5.476 coches, y encabeza una serie de carreteras autonómicas interiores en las que no se alcanza un uso diario de 3.000 vehículos, con ocurre con la de Bora a Carballedo, de Moraña a Campo Lameiro o de Xeve a Campo Lameiro