La pontevedresa Carmela González está trabajando en una guía juvenil para que los niños de habla inglesa aprendan chino. La ilustradora expone estos días una serie de obras en la cervecería O Grifón de la zona monumental.
-¿Qué nos vamos a encontrar en esta exposición?
-Estos son los bocetos que fui realizando entre encargos y encargos. No tienen ninguna temática en concreto y es, sobre todo, un trabajo personal. Son ese tipo de trabajos con los que te sueltas, porque no son por encargo. Son momentos. También hay caricaturas, como las de Los Ramones y Ozzy Osbourne.
-¿Siguen una técnica única?
-Yo me profesionalicé en una empresa de animación, de ahí que los originales suelan ser en blanco y negro a los que aplico el color en ordenador.
-¿Qué diferencia hay entre crear para cómic o animación?
-Es una técnica totalmente distinta. En la animación haces el fondo por un lado y los personajes por el otro. Yo hago animación 2D tradicional. También la composición varía. La animación es mucho más trabajosa. Implica movimiento. Hay animaciones que son más de veinte dibujos por segundo. En algunas ocasiones he hecho solo las típicas "mariquitas". Me apasionan, pero son muchas horas de trabajo.
-¿A qué público dirige sus obras?
-Sobre todo al juvenil. La creación para el público infantil precisa de más texturas. Creo que mis creaciones se dirigen más a personas de entre 17 y 30 años. Creo que es a quien puede enganchar más mi estilo.
-¿Cuándo empezó en el mundo de la ilustración?
-Profesionalmente, en 2005, pero siempre creaba desde joven. Dibujaba en los márgenes de los libros de texto (risas).
-¿Cómo se dio cuenta de que podía dedicarse a ello profesionalmente?
-Fue a raíz de un curso de animación. Tenía algo más de veinte años. Me di cuenta de que podía trabajar en esto.
-¿Se puede vivir de la ilustración en Galicia?
-La verdad es que ahora está muy difícil. Yo hago más cosas. Hasta hace tres años era posible, pero ha cambiado todo mucho, desde la forma de conseguir trabajos hasta los contactos.
-¿Es difícil conseguir exponer al público?
-No tanto. Yo ahora estoy pendiente de exponer en una galería dedicada exclusivamente a la ilustración en Madrid.
-¿Y hacerse un hueco en el mundo editorial?
-Eso sí que es realmente difícil. A veces te dicen que sí, que les gusta tu trabajo, que tienen pensado cambiar de estilo.. . pero es complicado.
-¿Cuáles son sus referentes en el mundo de la ilustración?
-Willeifner, Xaquín Marín, Luis Davila... Sobre todo, me gusta el estilo muy gallego.
-¿Hay buenos artistas en Galicia?
-Los hay. Hay muy buenos, sin duda.
-¿En qué está trabajando ahora?
-Estoy trabajando con una guía juvenil para que los niños de habla inglesa aprendan chino. Es a través de una empresa estadounidense. Hay que moverse mucho.
