A punto de cumplirse casi una década desde que se produjeran las primeras actuaciones a raíz de una identificación realizada en Lérez por agentes de la Policía Local de Pontevedra, el Tribunal Supremo acaba de dar carpetazo al proceso judicial abierto a raíz de la bautizada como "Operación Boquerón", que permitió desarticular una banda integrada por ciudadanos marroquíes y españoles que se dedicaban al robo y posterior contrabando de vehículos de alta gama que enviaban a países de África y Asia utilizando diferentes puertos, uno de ellos el de Vigo.
Entre los detenidos había varios gallegos, afincados en O Salnés y Redondela, así como dos ciudadanos marroquíes afincados en la ciudad de Pontevedra. En su momento se publicó que una de las víctimas de estas red fue la entonces estrella del Real Madrid, David Beckham, aunque su vehículo (un BMW X5 blindado valorado en cien mil euros) no formaba parte de este juicio que se celebró el pasado año en Galicia.
Aquella parte de la Operación Boquerón llevó al banquillo de la Audiencia Provincial de A Coruña a un total de diez acusados de los que ya entonces tres resultaron absueltos. Sí se dictó sentencia condenatoria para otros siete, entre ellos uno de los magrebíes asentados en Pontevedra. Se les consideraba autores, entre otros y no de todos los ilícitos a cada uno de ellos, de delitos como asociación ilícita, robo con fuerza, hurto y receptación de material robado, como es el caso de algunos vehículos sustraídos que escondían en un almacén de Boqueixón antes de remitirlos a terceros países a través del puerto vigués.
Al frente de la organización se sitúa a Abdelouuahed Abboud a quien el Tribunal Supremo confirma la pena que le impuso la Audiencia y que es la más elevada de todos los componentes del grupo: penas que suman 28 años de prisión por asociación ilícita, cuatro robos con fuerza, hurto y receptación.
También se impone una pena elevada, de 18 años de cárcel en conjunto, para Aziz Houmid, por estos mismos delitos. El Supremo también confirma la pena de 10 años que se le impuso a Hipólito Caro Torres, así como un año y medio de cárcel a Alberto Carlos Fernández, vecino de Redondela por colaboración con asociación ilícita y receptación.
El Alto Tribunal, no obstante, sí atiende los recursos formulados por tres de los acusados, entre ellos uno de los ciudadanos marroquíes detenidos en Pontevedra en 2007. Se trata de Hamid Echchorfi al que absuelven de los delitos que se le imputaban y por los que había sido condenado en primera instancia. Lo mismo ocurre con Said Hadad Serroukh. El tribunal también absuelve al arousano Juan Carlos Vázquez García (conocido como el "Piturro pequeno") de los delitos de colaboración con asociación ilícita, manteniendo una pena de seis meses por el de receptación. En Galicia se juzgó el robo o el intento de sacar de territorio nacional de un total de 10 vehículos de alta gama hallados en un almacén de Santiago y que procedían de concesionarios y otras empresas de lugares tan distantes como Ferrol, A Coruña, Ourense, Burgos, Reus, Lleida, Madrid o Cerponzóns, en Pontevedra, en donde sustrajeron un Mercedes de una empresa de transportes de la capital valorado en casi 44.000 euros.
