El club de jubilados y pensionistas de Noalla celebró ayer su tradicional comida de confraternidad a la que asistieron 180 comensales que dieron buena cuenta de mariscos, carnes y pescados. Tras los postres vino el baile que se prolongó durante buena parte de la jornada en un día de gran amistad y donde no faltaron las anécdotas entre los asistentes. El alcalde, Gonzalo Pita, y la concejala de Benestar, Sandra Fernández Agraso, participaron en el convite.