El equipo de gobierno de Ponte Caldelas solicitará a la Xunta la reconversión de una vivienda comunitaria para personas con discapacidad psíquicos en un centro de día para mayores para que pueda ser utilizado por residentes en municipios vecinos que carecen de este servicio. El alcalde, Andrés Díaz, pedirá una entrevista con los responsables del Consorcio Galego de Servizos da Igualdade e Benestar para utilizar el edificio cuya rehabilitación "costó más de medio millón de euros" y que "nunca fue utilizado para el uso para el que fue concebido", según el Concello.

Al respecto, el regidor afirma que para la conversión de esta edificación "no tendría que realizarse prácticamente inversión alguna" y se podría dar un servicio a la ciudadanía con una demanda muy importante debido al gran número de personas que se encuentran en la franja de edad "adecuada para este servicio". Además cree que el servicio podría ser compartido entre varios municipios, de ahí la implicación autonómica.