Aunque las obras en la plaza comenzarán el martes, para es día ya debe estar operativo todo el sistema circulatorio futuro, que obliga, entre otras cosas, a adaptar los accesos al aparcamiento subterráneo. Por ello, la empresa que gestiona estas instalaciones ya ha iniciado las labores para que sus rampas de entrada y salida estén disponibles. Las rampas de entrada volverán a ser de salida y viceversa, como ya ocurría hasta hace siete años. Esto incluye también trasladar de sitio las máquinas para obtener e introducir los boletos de aparcamiento y readaptar la señalización interior.

Paralelamente, en la esquina de la plaza más próxima al colegio de Barcelos se ha ejecutado una ampliación de aceras. Precisamente esa zona será la que se peatonalice, con una plataforma al mismo nivel que las aceras.

Con el cierre del tramo peatonal también se pone en marcha la limitación horaria de todas las plazas de aparcamiento, que serán en su totalidad de servicios, por un máximo de 15 minutos. Además, esa modalidad se extenderá a todas las franjas de aparcamiento de Benito Corbal, entre los cruces de Cobián Areal y Sagasta, así como a la práctica totalidad de la calle Perfecto Feijóo Los cálculos de la Policía Local indican que con esta reordenación se eliminan 58 plazas, y 54 quedarán en régimen de servicios (15 minutos) de 8.00 a 13.30 y de 16.30 a 21.00 horas. El número de rotaciones diarias sería de 2.160.