Desde la DGT destacan la importancia de mantener al día las condiciones técnicas del vehículo. Según un estudio realizado por Tráfico, el riesgo de fallecer o sufrir una lesión con hospitalización aumenta con la antigüedad del vehículo. En comparación con los turismos de hasta 4 años, el riesgo de fallecimiento es 1,6 veces superior en los turismos de 10 a 14 años y 2,2 veces superior en los turismos de 15 a 19 años.
En Pontevedra se calcula que algo más de un 65% de los vehículos tienen entre 8 y 24 años, y más de un 20% han superado los catorce años. Menos de un 10% fueron adquiridos en los últimos diez años.
También se calcula que en torno a un 25% de los camiones que circulan por el municipio tienen una antigüedad superior a los 14 años.
Además de aumentar la peligrosidad por la antigüedad, no tener al día las condiciones técnicas del vehículo puede acabar siendo muy perjudicial para el bolsillo del conductor, dado que se enfrenta a posibles sanciones de hasta 500 euros. Esto ocurre cuando la inspección ha resultado negativa, es decir, que el coche tiene defectos tan graves que ni siquiera podría dejar la estación de ITV por sus propios medios sino que debería transportarse en una grúa hasta el lugar de reparación. En el caso de que el coche tenga la ITV caducada o sea desfavorable, el conductor se enfrenta a una multa de 200 euros. Dependiendo del estado de los vehículos, incluso pueden llegar a ser inmovilizados.
Además, la Jefatura Provincial de Tráfico incluso puede proceder a dar de baja el vehículo detectado sin la ITV en regla si en un plazo determinado su titular no ha acreditado que sí ha superado esta inspección.
