El gobierno local "trabaja" en el proceso para sacar a concurso la gestión de las piscinas municipales de Campolongo pero desconoce cuándo podrá convocarlo, si bien admite que será difícil que todo esté resuelto antes de que concluya la actual prórroga, en junio próximo. La concejala de Deportes, Anxos Riveiro, explicó ayer que los servicios técnicos ya trabajan en el estudio de viabilidad económica referido exclusivamente a las piscinas, tras quedar al margen del proceso el centro lúdico-deportivo de A Parda.
La renovación de la gestión de las piscinas presenta urgencia no solo por el retraso que acumula la convocatoria del concurso, con al menos siete prórrogas irregulares, sino por la patente necesidad de acometer obras de modernización de las instalaciones. Hace unos días el PP ya alertaba sobre una posible octava prórroga irregular en esa explotación y denunciaba una vez más "el estado de abandono que sufren las instalaciones".
El PP exige una intervención "urgente en este complejo deportivo y entre las deficiencias que presentan las instalaciones, destaca "el mal funcionamiento de las máquinas por llegar al fin de su vida útil, el pésimo estado de los vasos de las piscinas, o la ausencia de un socorrista dedicado de forma permanente y exclusiva a la piscina".
Este proceso se trató de resolver en el pasado mandato, cuando el PSOE, entonces al frente del área de Deportes, sacó un concurso para la explotación conjunta de estas piscinas y del centro de A Parda, que incluía su ejecución, pero ninguna empresa se presentó ante su nula rentabilidad. Con el nuevo gobierno municipal se abandonó esa gestión conjunta y se optó por licitar solo la explotación de Campolongo, pero pasados ya nueve meses del mandato, el gobierno local aún desconoce cuándo lo podrá resolver,
El asunto no fue objeto de debate en la junta del Instituto Municipal de Deportes (IMD) de ayer, donde Ciudadanos planteó una seria de propuestas que no salieron adelante. Una de ellas fue solicitar que todas las instalaciones deportivas municipales sin excepción, fueran gestionadas directamente por el IMD y no por clubes o entidades vecinales, con el fin de "permitir un uso igualitario y gratuito por parte de todos los ciudadanos".
