El jurado popular declaró ayer a José Cortiñas Romero culpable del asesinato de su esposa, María Luisa Jiménez Jiménez "Lupe", en febrero de 2014. Una decisión que adoptó por unanimidad tras considerar que Cortiñas acabó con la vida de su mujer después de propinarle varios golpes en la cabeza y en la nariz y hasta 16 puñaladas en cuello, muñeca y tórax. Ataque que el jurado calificó, también por unanimidad, como "sorpresivo e inesperado" de tal forma que la mujer no pudo defenderse. Es decir que consideran los hechos como un delito de asesinato, como reclamaban las acusaciones ,y no de homicidio, tal y como solicitaba la defensa.

El jurado rechaza también, por unanimidad, que Cortiñas sufriera algún tipo de "ofuscación transitoria" (él se refirió a esta circunstancia en el juicio como un "arrebato") que mermase sus capacidades en el momento en el que se produjeron los hechos.

Asimismo, consideran probado por siete votos contra dos, que si bien el acusado no atacó a "Lupe" Jiménez con la intención de provocar directamente la inviabilidad del feto del que estaba embarazada de cinco semanas, sí que era consciente de que el ataque podría acabar con el desarrollo del futuro bebé, por lo que este hecho también satisfizo a la acusación particular al entender que el jurado aprecia dolo y la existencia del delito de aborto en concurso con el de asesinato.

También ven probado por unanimidad que el acusado procedió a contar a las autoridades los hechos , además de desvelar el lugar en el que había depositado el cadáver de su esposa, en la única circunstancia que pudiera resultar favorable para el acusado al considerar que sí hubo confesión.

Con todo, el abogado de la acusación particular que ejercen los hijos de la víctima, manifestó su confianza de que ahora la Audiencia imponga al acusado la pena máxima por asesinato, de 20 años, (la mínima es quince) puesto que considera que el jurado apreció como probados todos los agravantes que planteaban las acusaciones (entre ellas también las de parentesco y abuso de superioridad). Bouzas, en nombre de la familia de la víctima, manifestó su satisfacción por el veredicto del jurado dado que se atendieron por unanimidad todas las tesis que planteaba aunque también adelanta que presentará recurso ante el TSXG si la sentencia no recoge finalmente los 20 años de prisión que solicitan, la misma pena que también pide la Fiscalía y la acusación popular, que ejerce la Xunta.

Además la Fiscalía pide al Tribunal que el acusado indemnice al hijo mayor de la fallecida con 19.172,54 euros y a los menores con 47.931,33 euros cada uno por la muerte de su madre.

La defensa recurrirá

En la misma sala, el abogado defensor de José Cortiñas ya adelantó que presentará recurso de apelación contra la sentencia que dicte la Audiencia en base a esta decisión del jurado.

El veredicto se conoció ayer en torno a las diez de la noche después de varias horas de deliberación del jurado durante la tarde. La Sección Cuarta de la Audiencia había retomado esa misma mañana a puerta cerrada la última sesión del juicio contra el autor confeso del asesinato. Se decidió continuar el juicio sin público después de la agresión que sufrió el miércoles el acusado por parte de familiares de la víctima. El resto del juicio se desarrolló con normalidad.

Si bien no se permitió la entrada a la sala de vistas ni de público ni de los medios de comunicación, si trascendió que las partes elevaron a definitivas sus conclusiones provisionales tras la lectura de los respectivos informes.

Antes de que se retomara la sesión, el abogado de la acusación particular, Víctor Bouzas, adelantó alguna de las tesis que defendió después en su intervención ante los miembros del jurado. Sostuvo que la muerte de "Lupe" Jiménez a manos de su marido José Cortiñas fue un "ajusticiamiento en toda regla" debido a los "celos enfermizos" del hombre. "Aprovechando esa confianza que genera el matrimonio", dijo el letrado, primero le propinó una paliza que queda reflejada en las "heridas de sometimiento" y luego la mató.

Para argumentar esta tesis, se fundamenta en los informes forenses en los que se detallaba que el cuerpo de la mujer tenía rotos los huesos de la nariz, los dos labios destrozados, el ojo izquierdo hinchado y doce puñaladas "no tiradas al azar", sino cercanas todas ellas al corazón (tres alcanzaron este órgano) y al pulmón izquierdo. Asimismo, los forenses destacaron una herida de "degollamiento" y otras tres que atraviesan el cuello de lado a lado.

Sin heridas defensivas

El abogado Victor Bouzas insistió en que esas lesiones aparecen "por una paliza que somete a la víctima". "Y, después, sencillamente le da muerte, pero de una forma premeditada, consciente, y dando en zonas que son absolutamente vitales", reiteró. Destacó también la ausencia, según la autopsia, de heridas de defensa en la víctima, así como el hecho de que en las uñas de la mujer no se hubieran detectado restos de ADN del acusado, lo que indicaría, a juicio del letrado, que "Lupe" no tuvo oportunidad de defenderse del "inopinado" ataque de su agresor.