Los populares de Sanxenxo denunciaron ayer que el Gobierno local lleva ocho meses con la reforma de la Avenida Luis Rocafort "paralizada" y recalcó que las obras estarían finalizadas desde el verano de 2015 "si gobernase el Partido Popular".

"Hace quince días comparecimos para hablar de la Avenida de Luis Rocafort. Ahora, el cuatripartito hace unas declaraciones al respecto, y nosotros queremos hacer algunas aclaraciones", aseguró la concejala popular María Deza.

"No podemos olvidar que en la presentación del proyecto, el pasado mes de julio, el cuatripartito se comprometió ante el anterior presidente de la Diputación y los técnicos, así como de la empresa adjudicataria, a iniciar la obra en el mes de septiembre para que la avenida estuviese operativa en la época estival de 2016", criticó Deza.

En este sentido, señaló que es "absolutamente falso" que el proyecto anterior, aprobado por el PP, no incluyese todas las canalizaciones. "En el proyecto aprobado y adjudicado se contemplaba la urbanización de toda la calle: pavimentación, aceras, canalizaciones subterráneas de abastecimiento, saneamiento y pluviales, incluido el alumbrado público y el mobiliario urbano", recordó.

"Son totalmente falsas las declaraciones del Gobierno local de que no se reformaron todos los servicios", añadió.

María Deza se preguntó, en nombre del Partido Popular de Sanxenxo, "¿cómo es posible, tal y como dice el cuatripartito, que el proyecto inicial solo contemplase 600 metros de avenida cuando la avenida completa no tiene más de 580 metros? Mienten", aseveró.

En la misma línea, recordó que el proyecto inicial incluía la avenida desde la playa de Silgar hasta la rotonda de Arnelas.

"La Diputación renunció a hacer el paso inferior porque no lo quiere financiar, y el cuatripartito no solo consiente, sino que argumenta que no sería eficaz. Entendemos que lo hace para tapar su escasa influencia en el organismo provincial", aseguró la concejala popular, que hizo hincapié en que es una de las zonas con más tráfico de Sanxenxo.

"La razón por la que lo rechazan es política. La nueva Diputación prefiere invertir ese dinero en otros ayuntamientos, pero el Gobierno municipal tiene que defender los derechos de los vecinos de Sanxenxo y de sus visitantes", incidió.

Deza recordó que "nunca antes" el cuatripartito había manifestado su oposición a la reforma de la Avenida de Arnelas.